Al menos 21 personas han perdido la vida en el centro de los Estados Unidos como consecuencia de una serie de tornados que azotaron la región durante la noche. Estos fenómenos naturales afectaron particularmente a los estados de Kentucky y Missouri, donde se registraron un total de 14 y 7 muertes, respectivamente. La devastación ha sido significativa, y las autoridades locales están trabajando arduamente para hacer frente a la situación.
La fuerza de los tornados ha dejado a aproximadamente 600,000 hogares sin electricidad, desde Michigan hasta Tennessee, según las estimaciones de los funcionarios locales. Estos datos han sido recopilados por la cadena estadounidense ABC, que también reportó la ocurrencia de nuevas tormentas que se declararon en las primeras horas de este sábado. La situación meteorológica se ha mantenido inestable, con la posibilidad de más tormentas en el horizonte.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, ha confirmado que se están llevando a cabo evaluaciones de daños y ha advertido que el número de víctimas podría aumentar a medida que se continúen las labores de búsqueda y rescate. «Es probable que la cifra de muertes suba aún más», expresó, enfatizando la importancia de explorar las áreas más vulnerables afectadas por los tornados. Horas antes de estos trágicos eventos, Beshear había declarado un estado de emergencia en respuesta a las violentas tormentas que golpearon el estado.
En la ciudad de Saint Louis, en Missouri, se reportaron cinco muertes, según declaró la alcaldesa Cara Spencer. «El nivel de destrucción que ha sufrido San Luis a causa de las tormentas es devastador, y mis pensamientos están con todos aquellos cuyas vidas han cambiado drásticamente hoy», comentó. Las tormentas que impactaron Missouri fueron tan intensas que provocaron el colapso de varios edificios y el desprendimiento de techos de viviendas, hechos que fueron reportados por ABC News.
La alcaldesa ha instado a los ciudadanos a permanecer en sus hogares para evitar cualquier riesgo adicional, dado que la situación climática podría deteriorarse nuevamente. «En los próximos días tendremos muchas oportunidades de canalizar ayuda y realizar el trabajo necesario. Pero esta noche, es fundamental que se queden en casa y dejen que nuestros rescatadores hagan su trabajo», subrayó, resaltando la necesidad de mantener la calma y seguir las recomendaciones de seguridad.
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