

Manizales, 24 de septiembre de 2025. Manizales es la etapa de la reunión de VI de escritoras de Caldas entre el 23 y el 27 de septiembre, un evento consolidado como referencia en el país para la apertura de espacios de visibilidad y diálogo alrededor de la literatura escrita por las mujeres. En este número, la reunión se ocupará del tema «narraciones y escritos para cuidar la vida y la buena vida», con el objetivo de invitar a la reflexión sobre la palabra como una herramienta que supera al individuo y nos permite tejer comunidad, memoria y esperanza.
El programa reúne a 60 escritores de 17 municipios colombianos y de seis países latinoamericanos, que compartirán sus obras, experiencias y visiones en una amplia agenda de conversaciones, presentaciones poéticas, talleres y diálogos abiertos. Según esta diversidad de votos, la participación de siete semillas que consisten en niños y jóvenes en la capacitación, lo que fortalece la intergeneración y el carácter inclusivo de la reunión, se convierte en una de sus características de las primeras versiones.
Según Johana Patiño López, coordinador de la red de escritores de Caldas y la reunión, el valor de este espacio está en la estructura de las experiencias y parece que eso converge en torno a la palabra escrita. «Nuestro encuentro es excelente porque tenemos un tejido intergeneracional, intercultural e intertritorial alrededor de la palabra y la escritura hecha por mujeres de diferentes edades, de diferentes territorialidades, con diferentes experiencias biográficas y de escritura», dijo.
Entre los participantes, la poeta y gerente cultural Ana Milena López de Vélez, nacida en Palmira y reconocida por su carrera en literatura, enseñanza y análisis social. Autor de libros como «Symphony for Two Strings Violin» y «Bands and Tapes», su presencia en la reunión representa el poder de una voz que viajó escenarios nacionales e internacionales con un trabajo que combina poesía, reflexión crítica y dedicación al área.
De esta manera, la reunión VI de mujeres escritoras de Caldas se proyecta como un escenario en el que se coloca la literatura en el servicio de la vida, mientras que Manizales hace un punto de reunión cultural de alcance latinoamericano, que celebra la escritura femenina en toda su diversidad.