
Durante su intervención en la #Maratón DigitalPazElectoral: 12 horas de diálogo por la democracia, liderada por EL TIEMPO CASA EDITORIAL y la Procuraduría General de la República, la gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, hizo un contundente llamado a entender la paz electoral no como la mera ausencia de violencia, sino como un ejercicio diario de respeto, transparencia y confianza en las instituciones.
“La paz electoral es un ejercicio libre, informado y valiente”, afirmó el presidente, destacando que el derecho a participar en las elecciones sólo se hace realidad cuando los ciudadanos sienten que su voto cuenta, que las reglas son justas y que pueden expresar sus ideas sin temor a represalias.
La Voz de las Regiones, panel del maratón electoral en EL TIEMPO, en alianza con la Procuraduría General de la República. Foto:Néstor Gómez. EL TIEMPO
La democracia como oportunidad para sanar
Para Toro, cada proceso electoral representa una oportunidad para fortalecer la convivencia, especialmente en un departamento como el Valle del Cauca, marcado en los últimos años por la violencia y la presencia de estructuras al margen de la ley que se han encargado de incrementar sus economías ilícitas.
“La democracia es el momento de demostrar que, a pesar de la adversidad, puede florecer con más fuerza”, afirmó.
Reconoció que persisten desafíos en las zonas rurales de municipios como Jamundí, donde se han atrincherado estructuras disidentes, que a través de acciones criminales generan zozobra entre los habitantes. También en sectores costeros donde grupos armados ilegales continúan ejerciendo presión sobre la población, generando amenazas y, en algunos casos, intentando sabotear la participación política.
La Fuerza Pública busca ganar espacio en zonas que antes estaban dominadas por grupos violentos. Foto:Juan Pablo Rueda/EL TIEMPO
“La ciudadanía ha dicho ‘no’ a cortar ese derecho”, destacó el presidente vallecaucano.
Articulación institucional y protección de líderes
El gobernador destacó los esfuerzos coordinados con la Defensoría del Pueblo, la Misión de Observación Electoral (MOE) y la Fuerza Pública para garantizar que las elecciones sean seguras.
Como ejemplo, mencionó el apoyo brindado durante las recientes elecciones de consejos juveniles, donde se trabajó activamente para evitar la manipulación política o la instrumentalización de los jóvenes.
Asimismo, reconoció que, a pesar de los esquemas de protección del Gobierno Nacional, los líderes sociales y ambientales siguen siendo blanco de amenazas, muchas veces solo por “pensar diferente”. Ante esto, insistió en que la prevención de la violencia política no depende únicamente de la seguridad, sino del reconocimiento, la legitimidad y el apoyo social a quienes ejercen el liderazgo comunitario.
Iris Marín, Defensora del Pueblo, estuvo en el panel de seguridad y paz electoral Foto:Archivo
‘La paz electoral la construimos entre todos’
En un mensaje que resonó como eje central de su intervención, Toro enfatizó que la paz electoral no se decreta, se construye colectivamente. “Se construye con transparencia de las instituciones, sí, pero también con la confianza que la comunidad deposita en ellas”, afirmó.
Y concluyó con una nota de esperanza: “Estamos convencidos de que vamos a tener un mejor país, y ese mejor país lo vamos a construir juntos, desde el respeto a las diferencias y fortaleciendo el diálogo”.
Su intervención cerró el bloque suroeste en el maratón nacional en una jornada que busca tejer, a través del diálogo, las bases de unas elecciones libres, seguras y verdaderamente democráticas.
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La defensora del pueblo, Iris Marín, respecto a las alertas. Foto: