En la madrugada del domingo 11 de mayo, mientras muchas familias en Cartaagen celebraban el Día de la Madre, un trágico suceso conmocionó a la comunidad. A las 3:10 am, según las autoridades de la policía metropolitana, dos sicarios en una moto acabaron con la vida de Carlos Alberto Peralta Pereira, un hombre de 33 años que era conocido en las redes sociales por su contenido humorístico. Este hecho resalta no solo la violencia en la ciudad, sino también la fragilidad de la vida que muchos buscan mejorar.
El ataque, de acuerdo con testigos que presenciaron la escena, se desarrolló frente a una fiesta. Carlos se encontraba en la calle conversando con un grupo de amigos cuando un hombre se le acercó y, sin pronunciar ninguna palabra, le disparó al menos tres veces. Lamentablemente, perdió la vida en el lugar de los hechos. El asesino a sueldo escapó rápidamente junto a un cómplice que lo esperaba en una motocicleta, generando un pánico inmediato entre quienes se encontraban cerca.
«Todo sucedió en cuestión de segundos. No hubo tiempo para reaccionar. Solo escuchamos los disparos y luego lo vimos caer. Carlos estaba intentando mejorar su vida; no merecía esto,» relató un vecino del sector que prefirió mantener su nombre en el anonimato por razones de seguridad.
Un pasado complicado
Creador de contenido asesinado en Cartagena Foto:Cortesía
Las autoridades confirmaron que la víctima tenía un historial delictivo. Entre sus registros figuran cinco anotaciones por:
- Homicidio (2011, 2017).
- Robo calificado y agravado (2015, dos en 2016).
A pesar de este pasado, personas cercanas a Carlos Alberto indicaron que había intentado dejar atrás esa etapa de su vida. Tras cumplir una condena de prisión, «se había dedicado a la mampostería y a crear contenido digital enfocado en el humor y la vida del vecindario.»
En su perfil de Facebook, bajo el nombre de «Alberto Pereira», compartió videos caseros, bromas con sus vecinos, cámaras ocultas y reflexiones personales. Muchos de sus seguidores, principalmente del vecindario de El Restoso donde residía, lo recuerdan como un hombre carismático y trabajador que esforzaba por mantener a sus hijos mediante medios legales. «Él decía que quería hacer reír a la gente, que ya había pagado por sus errores y deseaba otra oportunidad,» comentó Luis Alfredo, un amigo de la infancia.
El asesinato de Carlos Alberto ha causado indignación y tristeza entre los residentes del sur de la ciudad, quienes claman por mayores programas de presencia y prevención policial para los jóvenes expuestos a entornos de violencia. Aunque las autoridades aún no han determinado el motivo exacto del crimen, no se descarta la posibilidad de un ajuste de cuentas relacionado con el pasado de la víctima.
Investigaciones en marcha
… Foto:Istock
La Policía Metropolitana de Cartagena (Mecar) ha informado que están avanzando en la investigación junto a la fiscalía para identificar a los autores materiales e intelectuales del homicidio.
Estamos trabajando con nuestras unidades de inteligencia e investigación criminal para aclarar este hecho lo antes posible. No descansaremos hasta que encontremos a los responsables.
Policía metropolitana de Cartagena
El trágico acontecimiento que le costó la vida a Carlos Alberto no fue un caso aislado esa mañana. Apenas una hora después, a las 4:00 a.m., también fue asesinado a tiros Jhon Fredy Caraballo Cantillo, de 23 años, en el barrio de Bruselas, ubicado en el sureste de Cartagena. Las autoridades investigan si existe conexión entre los dos asesinatos o si son producto de diferentes dinámicas de violencia urbana.
Mientras la familia de Carlos Alberto organiza su funeral, sus seguidores se despiden en redes sociales con mensajes que subrayan su intento por cambiar. «Estabas intentando hacer el bien, llenando de risas y esperanza a quienes te rodeaban. Que tu historia no sea olvidada en vano,» escribió uno de sus amigos en Facebook.
