En las recientes elecciones al Consejo de la Juventud, Santander experimentó un giro inesperado en su panorama político juvenil. El movimiento Es Tiempo se convirtió en la fuerza más votada en el departamento, alcanzando 6.421 votos y superando a los partidos tradicionales.
Más que una victoria numérica, el resultado dejó un mensaje claro: la juventud santandereana está lista para asumir un papel decisivo en la transformación de su territorio.
Consejo de la Juventud- Santander Foto:Suministrado a EL TIEMPO
Con candidaturas propias en 75 municipios, Es Tiempo logró elegir Más de 146 orientadores juveniles en Santander. Esta cifra no sólo representa una consolidación organizacional, sino también una demostración del alcance territorial del movimiento, que ha sabido conectarse con las realidades locales y rurales del departamento.
William Molina, joven de 20 años y director del movimiento, Resaltó que el resultado es fruto del trabajo colectivo y compromiso de cientos de jóvenes que recorrieron caminos y barrios, escuchando problemáticas y proponiendo soluciones desde los Consejos Juveniles.
Consejo de la Juventud- Santander Foto:Suministrado a EL TIEMPO
Molina, quien fue Consejero Nacional de Juventud de Santander, ha articulado yEsfuerzos con empresarios y líderes locales. para promover oportunidades para los jóvenes.
Para los miembros de es horala victoria va más allá de los escaños obtenidos. Lo que se ganó, dicen, Fue respeto, reconocimiento y credibilidad.
En un contexto donde crece la desconfianza hacia la política, el movimiento logró posicionarse como una alternativa fresca, transparente y comprometida con el servicio público.
“Esto es sólo el comienzo”dijo Molina. “Nuestro propósito es claro: ocupar espacios de decisión como asambleas, alcaldes, concejos y, por qué no, incluso el Gobierno.»
«Nosotros, los jóvenes, estamos cansados de la misma politiquería, corrupción y promesas vacías. Es hora de hacer un cambio real».
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