

Para transeúntes habituales del sector La Matuna, en el bullicioso corazón del Centro Histórico de Cartagena, La figura alta y desgastada de Sven Robert Stefan Nyström se había convertido en parte del paisaje urbano.
Con 57 años y más de 1,90 centímetros de altura, esta ciudadana sueca había hecho de las aceras que rodean el edificio del Citibank y el Palacio de la Aduana su residencia improvisada, muy, muy lejos, del frío escandinavo de su tierra natal: Suecia.
Ciudadano suizo rescatado de las calles de Cartagena Foto:Distrito de Cartagena
Era conocido popularmente como ‘El Sueco’. Sven vivió en una paradoja.: Era ciudadano de una de las naciones más prósperas del mundo y sobrevivía en las calles del trópico caribeño.
Dormía en la calle y se alimentaba con la caridad de los vecinos de la zona. y con las monedas que le regalaban los transeúntes. Sven es un hombre decente que nunca tuvo problemas con la gente ni fue violento.
Sin embargo, Su historia en Cartagena no acabó en el olvido del asfalto, pero en un vuelo de regreso a casa, gracias a una compleja operación humanitaria y diplomática que finalizó esta semana.
Fue Nidia Olivares, dueña del popular local de cócteles Sincelejo quien más estrechó la mano del ciudadano suizo, y quien alertó a las autoridades sobre el deplorable estado en el que vivía el extranjero.
“Es un hombre muy tranquilo y respetuoso, pensamos que es de esos turistas que vienen buscando mujeres o drogas, y le dieron alguna sustancia que afectó su memoria”, dice Nidia en entrevista con EL TIEMPO.
Ella le daba desayuno, almuerzo y cena y siempre le tendía la mano.
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el primer contacto
La alerta la dio la propia comunidad. Los vecinos y comerciantes del Centro Histórico, preocupado por el deterioro de Sven, Se comunicaron con la Alcaldía. Fue entonces cuando el equipo del Ministerio de Desarrollo Social, a través de su programa Habitantes de Calle, se acercó a él.
Ciudadano suizo rescatado de las calles de Cartagena Foto:Distrito de Cartagena
No fue un simple rescate. En un principio le ofrecieron la posibilidad de ingresar a la Casa de Tránsito Segundas Oportunidades.un centro diseñado para brindar refugio, alimentación e higiene mientras se buscan soluciones a largo plazo. Pero Sven, aferrado a su libertad o quizá desconfiado de sus circunstancias, rechazó la oferta de refugio.
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Nuestro compromiso es brindar un apoyo digno, cercano y respetuoso a quienes requieren apoyo. Este regreso fue posible gracias al trabajo conjunto y al esfuerzo permanente para garantizar un proceso seguro y humanitario.
Ana Milena Jiménez, Secretaria de Desarrollo Social.
El obstáculo legal
Ciudadano suizo rescatado de las calles de Cartagena Foto:Distrito de Cartagena
Mientras los trabajadores sociales intentaban garantizar su bienestar en la calle, surgió un obstáculo importante que explicaba, en parte, su permanencia en el limbo de Cartagena: Sven tenía una cuenta pendiente con la justicia colombiana. Una situación judicial activa le impidió salir del país, convirtiendo su pobreza en una prisión al aire libre.
Lejos de abandonar el caso, el equipo interdisciplinario de la Secretaría asumió un rol activo de defensa. Acompañaron a Nyström a la sala del tribunal, no como jueces, sino como garantes de derechos. Fueron más de dos años. Este buen hombre vivía en las calles de Corralito de Piedra.
“Nuestro compromiso es brindar un apoyo digno, cercano y respetuoso a quienes requieran apoyo”, explicó Ana Milena Jiménez, Secretaria de Desarrollo Social, al referirse a la tenacidad con la que se manejó el caso.
Luego de varias audiencias y negociaciones con la Fiscalía, se llegó a un acuerdo aprobado por un juez. La barrera legal había caído; El camino hacia Suecia estaba despejado.
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Es un hombre muy tranquilo y respetuoso, creemos que es de esos turistas que vienen buscando mujeres o drogas, y le dieron alguna sustancia que afectó su memoria.
La espera y el adios
Ciudadano suizo rescatado de las calles de Cartagena Foto:Distrito de Cartagena
Con la luz verde judicial, se activaron los engranajes diplomáticos. En una articulación triangular entre Migración Colombia, la Embajada de Suecia y el Consulado se preparó el regreso.
Las últimas tres semanas de Sven en Colombia no fueron en las calles. Permaneció en las instalaciones de Migración Colombia, donde se gestionó la logística final. No viajaría solo; La entidad contó con dos funcionarios para custodiar y acompañar su recorrido, asegurando que El hombre que una vez durmió frente al Citibank llegará sano y salvo a su destino.
Eilyn Medina, líder del programa Habitantes de la Calle, destacó el esfuerzo conjunto: «Hemos trabajado en coordinación con estas instituciones para resolver su situación judicial y facilitar su regreso a Suecia».
Hoy, La Matuna tiene un habitante menos, y Suecia recupera uno de los suyos. La historia de Sven Nyström sigue siendo un testimonio de que, incluso en las situaciones de vulnerabilidad más complejas, la cooperación institucional puede restaurar la dignidad y abrir el camino a casa.
Además, te invitamos a ver nuestro documental:
Documental de la periodista Jineth Bedoya. Foto:
cartagena