
El concepto de «burbuja» suele acelerar los latidos del corazón de quien lo escucha, especialmente si es inversor, porque se asocia a grandes pérdidas y crisis financieras. Sin embargo, Jeff Bezos propone verlo desde otro ángulo: si la burbuja es «industrial, no son malas», afirmó el millonario.
Según Bezos, será una fuente de avances revolucionarios que cambiarán a la humanidad para siempre y se convertirán en el preludio de algo mucho más grande y duradero. Sin embargo, el millonario advierte de un enorme riesgo real para las grandes empresas tecnológicas: «Cuando todo se calme y veamos quiénes son los ganadores, la sociedad se beneficiará de estos inventos».
Burbujas que dejan un legado. En el marco de la Italian Tech Week 2025 que se ha celebrado En Turín, Bezos definió claramente la situación en la que se encuentra el desarrollo de la IA: «Hay una burbuja, pero es una especie de burbuja industrial». El millonario aseguró que los inversores están tan entusiasmados con esta nueva tecnología que les resulta difícil diferenciar las ideas brillantes de las que no lo son. Pero este ruido y caos sirven para eliminar lo menos sólido y preservar lo que tiene verdadero potencial.
Para dar más contexto a su análisis de la situación, Bezos sacó de la hemeroteca: «Si nos remontamos a los años 90, cuando había una burbuja biotecnológica, había muchas empresas farmacéuticas emergentes que diseñaban medicamentos y utilizaban nuevas técnicas, el mundo se emocionó mucho. El mundo inversor se emocionó mucho. Como grupo, todos perdieron dinero. Pero conseguimos un par de medicamentos que nos salvaron la vida. Todavía usamos estos medicamentos hoy», destacó el fundador de Amazon.
La IA es como un arado. El millonario no se limitó a los tecnicismos, sino que llevó la idea a tierra firme utilizando una imagen simple y poderosa. Comparó la inteligencia artificial con la invención del arado: «Hace 10.000 años, o cuando sea, alguien inventó el arado y todos nos hicimos más ricos. Y eso es lo que está pasando», afirmó el millonario.
Esta metáfora ayuda a comprender que, en una fase de experimentación y riesgos masivos, surgen avances que modifican radicalmente la sociedad. Bezos señala así que la IA no es sólo un negocio para unos pocos, sino un salto histórico comparable a los grandes inventos del pasado. «Construimos herramientas y ellas aumentan, en términos de toda la civilización, nuestra abundancia», dice Bezos.
Edad de oro de la tecnología. El fundador de Amazon ofrece una visión optimista sobre el momento que vive la tecnología en la actualidad. «Tenemos el privilegio de vivir en una época en la que se están desarrollando múltiples edades de oro. Así que… los viajes espaciales están en medio de una edad de oro. La IA está viviendo en una edad de oro. La robótica en medio de una edad de oro», enumeró un entusiasta Bezos.
Bezos imagina un futuro en el que millones de personas vivirán en el espacio y los robots harán viajes regulares a la Luna: «Para 2045 millones de personas vivirán en el espacio y habrá robots viajando hacia y desde la Luna». Estos sueños espaciales están vinculados a la tecnología que se está desarrollando ahora, con la IA como pieza clave para desarrollar infraestructuras extraplanetarias y acelerar la innovación.
Estas visiones complementan la idea de que la «burbuja industrial» de la IA, que hoy parece una carrera desenfrenada, es en realidad el proceso de construcción de las bases tecnológicas que darán un nuevo significado a la vida humana en los próximos años.
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