El alcalde de Cali, Alejandro Eder, expresó su preocupación por el deterioro de las relaciones bilaterales entre Colombia y Estados Unidos, señalando que esta situación tendrá efectos directos en el bienestar de todos los colombianos, pues miles de empleos están en peligro.
«Estados Unidos es el principal socio comercial de Colombia, y millones de empleos dependen del acceso de los productos colombianos al mercado americano. Además, es el principal socio en materia de seguridad. El buen funcionamiento de la Policía y las Fuerzas Militares también depende en gran medida de la cooperación con ese país», afirmó Eder.
El Alcalde calificó de lamentable la forma en que se han expresado los presidentes de ambos países. “Es muy grave que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, haya emitido mensajes en redes sociales contra el presidente de Colombia, Gustavo Petro, y es igualmente lamentable que el presidente Petro haya utilizado términos como genocida, esclavista, fascista y asesino para referirse a su par estadounidense”, dijo.
Alejandro Eder recordó que el fin de semana el presidente Petro convocó a los colombianos en Estados Unidos a realizar un paro, interfiriendo en las relaciones internas de ese país. “Las relaciones bilaterales de Colombia son patrimonio de todos los colombianos, e incorporar el activismo a la diplomacia pone en riesgo cientos de miles de empleos y la seguridad nacional”, subrayó el mandatario local.
Impacto en Cali
Cali, como ciudad exportadora, y la región cuentan con el 18% del aparato industrial del país y el 30% de sus exportaciones tienen como destino Estados Unidos. “Hay decenas de miles de puestos de trabajo que dependen de esta buena relación comercial”, afirmó el alcalde.
El alcalde Eder también se refirió a la amenaza de seguridad y terrorismo que vive Cali, algo que, según él, no se veía desde hace 30 años y para lo cual la cooperación de Estados Unidos es fundamental para proteger a la comunidad caleña.
Por todo lo anterior, el alcalde Eder llama al Gobierno Nacional a tomar más en serio las relaciones internacionales de Colombia y entablar un diálogo que permita recuperar el respeto y el buen funcionamiento de las relaciones bilaterales, ya que está en juego el bienestar de millones de colombianos.
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