

El La deuda de la compañía Air-E con generadores de energía eléctrica ya excede los 1.300 millones de pesos, Una cifra que no solo preocupa al sector energético, sino que amenaza con afectar la estabilidad del sistema eléctrico del país, especialmente en la región del Caribe. La Asociación Nacional de Empresas Generantes (ANDEG) ha sido abrumadora al advertir que esta cartera, lejos de disminuir, está creciendo.
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Durante una reunión virtual con periodistas, El presidente de Andeg, Alejandro CastañedaFue enfático: «La situación es crítica. Llega el verano, la bolsa aumenta y la deuda se convierte en una bola de nieve incontrolable. Hemos pedido al gobierno que actúe con urgencia antes de que sea demasiado tarde. «
Castañeda recordó que en el pasado reciente el estado tenía la capacidad de respuesta: «El ex presidente Santos, en ese momento, logró nivelar la deuda de Electricaribe a través de cuatro documentos de Conpes. Hoy somos peores, y no hay señales de gestión claras. «
10 meses de intervención sin resultados visibles
Air-E Company trabaja. Foto:Vanexa Romero. Tiempo
Por más de diez meses, La superintendencia de los servicios domiciliarios públicos (superservicios) tomó el control de la compañía Air-E, pero, según Castañeda, los resultados han sido nulas. «La deuda no ha sido contenida, por el contrario, se ha triplicado», dijo.
El Ministerio de Finanzas fue consultado recientemente sobre posibles avances para resolver las obligaciones. La respuesta fue desalentadora: nos dijeron que no habían hecho ninguna gestión a este respecto
Alejandro CastañedaPresidente de Andeg
Aunque recientemente Air-E utilizaron 200,000 millones de pesos en subsidios, que fueron utilizados por Air-E para pagar parcialmente a los generadores, la deuda solo disminuyó de 1.5 a 1.300 millones de pesos. «Es un alivio temporal pero insuficiente. El problema subyacente permanece intacto», advirtió Castañeda.
Sin estados financieros y sin claridad del modelo de intervención
Sede de aire y Barranquilla. Vanexa Romero/The Weather Photo. Foto:Vanexa Romero/The Time
La principal crítica del Gremio de Energía no solo apunta al tamaño de la deuda, sino a la falta de transparencia de los supersavicios. «Después de casi un año de intervención, nadie sabe lo que la superintendencia realmente está haciendo con Air-E. No hay estados financieros públicos, no hay claridad del modelo», insistió el portavoz de Andeg.
Como se informó, Algunos generadores ya están considerando la posibilidad de suspender el suministro de energía a Air-E, no recibir pagos regulares. «No puede continuar vendiendo energía sin garantía de pago. Esto puede poner en control todo el esquema», advirtió.
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La situación no solo afecta a Air-E. Castañeda mencionó que Afinia, el otro vendedor de energía que opera en la región del Caribe, También enfrenta problemas financieros, lo que amplifica el riesgo sistémico.
El gobierno no paga, pero exige que el servicio no esté interrumpido
Presidente Ejecutivo de Andeg, Alejandro Castañeda. Foto:Andeg
Uno de los puntos más críticos indicados por Andeg es la contradicción del gobierno nacional, que requiere mantener el suministro de energía para los usuarios sin interrupciones, pero no garantiza los pagos correspondientes. «A nadie se le paga y, aun así, nos dicen que no podemos dejar de entregar energía. Es insostenible», dijo Castañeda.
Por ahora, El Ministerio de Minas y Energía ha anunciado un nuevo giro de $ 400,000 millones en subsidios, Pero los generadores consideran que esta cantidad no resuelve la crisis.
Además, Insisten en que no aceptarán la propuesta de Air-E de tener un año de gracia y dividir la deuda en cuotas de diez años. «Esa fórmula no es viable, mientras que el gobierno no asume su responsabilidad», dijo el presidente de Andeg.
Una advertencia final: el sistema podría colapsar
Crisis energética Foto:Ceet
YEl Electric Guild lanzó una alerta que debe ser tomada en serio por el ejecutivo: si no actúa rápidamente Y la decisión, el sistema eléctrico del país, y especialmente de la costa del Caribe, corre el riesgo de colapsar. «Esta no es una advertencia más baja. Es una realidad la que puede tocar a millones de usuarios en cualquier momento», concluyó Castañeda.
La situación pone una pregunta urgente sobre la mesa: ¿Cuánto tiempo esperará el gobierno para actuar, mientras que la deuda crece y compromete la seguridad energética de toda una región?