Desde hace más de dos años, Colombia cuenta con el túnel carretero más largo del continente: el Túnel del Toyo, que tiene una longitud de 9,73 km, superando ampliamente al Túnel de La Línea (8,65 km)
Se trata de una carretera subterránea completamente cubierta y asfaltada que atraviesa las entrañas del Alto del Toyo, una de las montañas más salvajes de Antioquia.
Sin embargo, esta joya de la ingeniería colombiana permanece cerrada y los únicos vehículos que transitan hasta allí son los de las obras.
El túnel carretero más largo de América se encuentra en Antioquia. Este es el túnel Toyo Foto:Javier Nieto
¿La razón? Para llegar a la boca de esta megaobra de hormigón, primero es necesario atravesar una compleja red de 19,5 kilómetros compuesta por 11 túneles adicionales, 13 puentes y varias vías al aire libre.
Estas obras, cruciales para la conexión, apenas se están ejecutando. Pertenecen al polémico Tramo 2 del proyecto, que el Gobierno Nacional “dejó tirado”, según los dirigentes antioqueños, lo que ha retrasado la inauguración de una infraestructura que, en su totalidad, suma 37,7 kilómetros, 18 túneles y 30 puentes.
El retraso político y el rescate regional
La historia de esta brecha es administrativa y política. Mientras que la Sección 1 —a cargo de la Gobernación de Antioquia y la Alcaldía de Medellín— inició obras en 2018 y concluyó su tarea, la Sección 2, a cargo de la Nación, inició con casi cinco años de retraso.
Así es el proyecto del camino al mar Gonzalo Mejía Trujillo o Túnel del Toyo y sus vías de acceso Foto:alejandro mercado
Las obras nacionales quedaron prácticamente paralizadas, relegadas en la lista de prioridades del Gobierno del Petro. La solución llegó después de una intensa lucha política: En diciembre de 2024, la Nación asignó el contrato de una de las etapas de este tramo a Antioquia y, posteriormente, en junio de 2025, entregó la segunda etapa.
Gracias a esta jugada estratégica, los entes territoriales (Gobierno y Alcaldía) asumieron el 100% del control de la obra. El resultado no se hizo esperar: el tramo traspasado, que apenas llevaba un 54% de avance y amenazaba con convertirse en un ‘elefante blanco’, en menos de un año ya supera el 60% y avanza a toda velocidad para cumplir con una fecha definitiva: finales de 2026.
¿Qué falta para ver la luz al final del túnel?
El desafío técnico actual es titánico. Desde enero de este año, maquinaria pesada rompe la montaña entre Santa Fe de Antioquia y Giraldo. El foco de atención se centra en el llamado «túnel cero».
Excavación de túnel cero Foto:Javier Nieto
Este oleoducto de un kilómetro es la pieza clave del rompecabezas. Actualmente ya se han excavado 300 metros de roca y tierra y el objetivo es ambicioso: alcanzar el cale (la excavación total que une ambos extremos) para abril del próximo año.
José Fernando Flores, gerente del proyecto Túnel del Toyo, brindó un mensaje de tranquilidad en medio de la complejidad: “Ya se ha avanzado en la parte más difícil de este tramo y afortunadamente no hay situaciones patrimoniales pendientes que detengan lo que queda por hacer”.
El calendario dicta que todo estará listo a finales de 2026. Soy optimista, creo que podría ser un poco antes.
Esta certeza se sustenta con talonario en mano: tanto el Gobierno como la Alcaldía garantizaron los más de 850.000 millones de pesos necesarios para concretar la hazaña.
“De los 11 túneles de este tramo sólo encontramos nueve iniciados. El túnel cero y 10 no fueron iniciados, fueron tarea del Invías. Hemos acelerado y esperamos terminar la excavación en marzo o abril para comenzar el revestimiento. El calendario dicta que todo estará listo a finales de 2026. Soy optimista, creo que podría ser un poco antes, aunque en estas obras siempre hay imprevistos. Pero lo peor, desde el punto de vista técnico, ya pasó”, afirmó Flores.
Director de proyecto del túnel Toyo en el lugar Foto:Javier Nieto
Respecto al equipamiento electromecánico del túnel de Toyo -el más largo- En el año 2022 se contrató todo este equipo electromecánico que ya se encuentra en el departamento.
“En diciembre y enero se iniciará la instalación de estos equipos electromecánicos por parte de la firma contratista que eligió a Invias. Esto nos da la posibilidad de que el próximo año tengamos funcional todo este tramo”, dijo Luis Horacio Gallón, secretario de Infraestructura.
ingeniería extrema
Más allá de los túneles, el desafío al aire libre es igualmente desafiante. Quedan ocho puentes (viaductos) por terminar. En muchos casos, el camino recién se está abriendo en una geografía accidentada y hostil donde no existía ningún camino. Todo lo que se construye es un camino nuevo, conquistado a la pura montaña.
El Túnel Toyo es el túnel más largo del país. Foto:Jaiver Nieto Álvarez
La logística es de precisión quirúrgica. Flores explicó que hay que trabajar bajo la lógica del “camino crítico”: empezar por lo más difícil (el túnel cero) y descomponer la programación hacia lo menos complejo.
“No todo está en ejecución, porque no hay manera de hacerlos simultáneamente. Hay que hacerlo uno tras otro, ya que requieren excavación previa«Pero vamos bien, el 2026 va a ser un año muy duro de trabajo, tenemos que trabajar muy duro», añadió Flores.
La topografía de la zona requiere soluciones de alta ingeniería: los conductores pasarán de un túnel a un puente e inmediatamente a otro túnel, en una sucesión vertiginosa. Para ponerlo en perspectiva: en el Tramo 1 (18,2 km), sólo 4,4 km son vías libres; el resto es infraestructura subterránea o aérea.
Túnel Toyo Foto:@tuneldetoyo
Orgullo nacional bajo la montaña.
En medio de las buenas noticias, el responsable del proyecto destacó un aspecto que trasciende el hormigón y el acero: el talento humano. La gran mayoría de la megaobra ha sido construida por manos e intelectos colombianos.
“Esto es un gran orgullo. Tenemos el túnel más largo del continente y tuvimos algunos problemas técnicos en su interior que nadie se imagina, pero los solucionamos con nuestra ingeniería. Contamos con un ingeniero en el proyecto que tiene experiencia en más de 140 km de túneles y que nos ha ayudado en cada dificultad con su experiencia. Afrontar el desafío de construir un puente, que después del puente viene un túnel, luego otro túnel, luego otro puente, y así sucesivamente, ha sido un desafío maravilloso y hemos sabido afrontarlo, nos sentimos muy orgullosos de eso”, afirmó el directivo.
Inversiones aseguradas
Túnel Toyo tramo 2 2025 Foto:alejandro mercado
La Secretaría de Infraestructura de Antioquia informó que este año ya se han invertido $240.000 millones en este tramo y que, el próximo año, la suma ascenderá a $300.000 millones más.
“Si no hubiéramos asumido esta obra, estaría terminada en 2029 o 2030 perjudicando a nueve departamentos del país y a todos los antioqueños, especialmente a los de Urabá.
El funcionario indicó que, de los más de 5 mil millones de pesos que terminará costando el proyecto, cerca de 2 mil 700 millones han sido aportados por el gobierno departamental.
A lo anterior se suman los más de $800.000 millones que la Alcaldía de Medellín dispuso para el Tramo 1 y los $342.000 millones que indicó que destinará para el Tramo 2. El resto es lo que pudo invertir el Gobierno Nacional.
ALEJANDRO MERCADO – @AlejoMercado10
Periodista de la nación
Medellín