La Casa Blanca negó este jueves que el presidente estadounidense, Donald Trump, pretenda ejecutar a los legisladores demócratas que pidieron a miembros de las fuerzas armadas estadounidenses que rechazaran cualquier orden «ilegal» de las autoridades, aunque reiteró que su conducta «puede ser castigada por la ley».
Así lo afirmó su portavoz Karoline Leavitt en una rueda de prensa donde criticó que «muchos en esta sala quieren hablar de la respuesta del presidente, pero no de lo que le impulsó a responder de esta manera».
En ese sentido, acusó a los congresistas demócratas de «conspiración para orquestar» un vídeo dirigido a militares en servicio, «alentándolos a desobedecer las órdenes legítimas del presidente». Por ello, aunque negó que el presidente busque la pena de muerte para ellos, cree que el vídeo «puede estar penado por la ley».
«Dejaré que el Departamento de Justicia y el Departamento de Guerra -el nombre al que la administración Trump se refiere como Departamento de Defensa- decidan eso», añadió, afirmando que «no soy abogada».
El líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, también se pronunció sobre las polémicas palabras de Trump, advirtiendo que representan «una amenaza directa extremadamente grave (…)».
«Cada vez que Donald Trump hace una declaración como ésta, aumenta la probabilidad de violencia política. «Ninguno de nosotros debería tolerar este tipo de comportamiento», se quejó en declaraciones difundidas por la cadena de televisión CBS, condenando al presidente por «echar más leña al fuego en un país empapado de gasolina política».
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Los seis hombres en cuestión emitieron una declaración conjunta diciendo que «es muy revelador que el presidente considere la repetición de la ley un delito punible con la muerte». «No se trata de ninguno de nosotros individualmente. (…) Todos los estadounidenses deben unirse y condenar los llamados del presidente a nuestro asesinato y violencia política», se defendieron.
Horas antes, el residente de la Casa Blanca había advertido en Truth Social sobre «comportamientos rebeldes castigados con la muerte» por parte de seis demócratas que, en un vídeo difundido a principios de esta semana, recordaron a las tropas en servicio que «nadie tiene que seguir órdenes que violen la ley o la Constitución».
Los congresistas, que anteriormente sirvieron en el ejército o en agencias de inteligencia, afirman en el vídeo que «nuestras leyes son claras: puedes negarte a obedecer órdenes ilegales. Debes negarte a ejecutar órdenes ilegales».
