La Alcaldía de Medellín y el Área Metropolitana del Valle de Aburrá (AMVA) presentó este martes 4 de noviembre el programa ‘Mi Río, Mis Quebradas’, una alianza que busca retomar la visión de la ciudad sobre la conservación del agua después de más de dos décadas de ausencia.
El acuerdo sella una inversión histórica de $663.383 millones para el período 2024-2027, destinados a la protección, recuperación y mitigación de riesgos en el río Medellín y sus afluentes, compromiso que también generará 1.700 empleos directos gracias a las obras incluidas en el programa.
El alcalde Federico Gutiérrez Zuluaga, quien encabezó la presentación, destacó el renovado enfoque de la estrategia, que promueve «la gestión integral del agua, la reducción de riesgos y la recuperación ambiental con participación comunitaria y sostenibilidad».
Río Medellín Foto:Javier Nieto
El presidente fue enfático al señalar la deuda histórica con los cuerpos de agua de la ciudad: “Como ciudad todos estábamos en deuda de mirar hacia el río, hacia nuestros afluentes y entender cómo se han desarrollado nuestros territorios. “El río y los arroyos fueron perdiendo protagonismo y la importancia de mantenerlos en términos de prevención”.
Del total de la inversión, una importante cifra de $120.000 millones se destinarán exclusivamente a la atención de puntos críticos del eje del río Medellín.lo que representa un incremento del 3.600% respecto al periodo anterior.
Esta asignación de recursos se distribuirá entre el Distrito, que aportará $366.383 millones, el AMVA, con $282.000 millones, y el Metro de Medellín, con $15.000 millones, permitiendo que las estrategias se expandan a los 10 municipios del área metropolitana, desde Caldas hasta Barbosa.
Río Medellín Foto:Javier Nieto
El programa ‘Mi Río, Mis Quebradas’ no sólo busca la recuperación ambiental, sino que también resuelve problemas sociales y de riesgo en los barrios. El compromiso incluye 21 nuevas obras hidráulicas en arroyos, atención a 30 puntos críticos por riesgo hidráulico en el eje del río y la intervención de 40.000 metros cuadrados de espacios públicos.
El alcalde Gutiérrez también abordó directamente el problema de las construcciones informales cerca de vías fluviales.
«Muchos barrios están construidos sobre barrancos. La gente dice, ‘el barranco dañó mi sala’; no, la sala se fue al barranco, la casa se fue al barranco.«, afirmó.
Río Medellín Foto:Javier Nieto
También aseguró que las acciones buscan pasar «del riesgo a la oportunidad de intervenir con obras hidráulicas en puntos específicos, con inversiones importantes en los barrios, que mejoren la calidad de vida y para que las familias puedan dormir tranquilas».
Los esfuerzos se traducirán en acciones concretas a corto y mediano plazo. En el primer semestre de 2026 se iniciará la contratación para el mantenimiento de 197 puntos críticos en arroyos, junto con estudios y diseños del sistema de drenaje en varios de ellos. La mayoría de las obras principales se completarán entre 2026 y 2027.
Además de las obras físicas, esta alianza deja una hoja de ruta a futuro: un plan maestro hasta 2040 que será la base para las próximas tres administraciones de Medellín.
Río Medellín Foto:Javier Nieto
Este plan incorporará instrumentos al Plan de Ordenamiento Territorial (POT) y al Plan de Acción Climática, asegurando la sostenibilidad y continuidad de las intervenciones de largo plazo.
De esta manera, la ciudad busca consolidar una visión integral donde la protección de los afluentes sea un eje central del desarrollo urbano y la adaptación al cambio climático.
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