
Imagen: Departamento de Tesoro/Reuters de EE. UU.
Estados Unidos y Ucrania están destinados a establecer un fondo de inversión y rehabilitación compartida. ¿Cómo debe funcionar y qué objetivo persiguen las partes? Después de firmar el acuerdo, todavía hay numerosas preguntas sin resolver.
El 30 de abril, se formalizó un acuerdo significativo entre Estados Unidos y Ucrania que busca establecer un fondo de inversión y rehabilitación. Este acuerdo surge en un contexto donde ambos países han estado buscando formas efectivas de fortalecer sus lazos económicos y fomentar el desarrollo a largo plazo de Ucrania. El acuerdo, que es relativamente breve con solo diez páginas más dos de apéndice, trae consigo un conjunto de expectativas sobre cómo se llevará a cabo esta colaboración.
El acuerdo trata sobre cuestiones cruciales como tierras raras, recursos naturales y minerales—términos que reflejan el interés de ambos países en consolidar un marco que no solo potencie la economía ucraniana, sino que también ofrezca a Estados Unidos la oportunidad de asegurarse un acceso más directo a materias primas importantes. Este esfuerzo para lograr un acuerdo se había intensificado tras el mandato del Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, a principios de año, reflejando la creciente importancia de la colaboración internacional.
Yulia Svydenko, vicepresidenta y ministra de Economía de Ucrania, destacó la importancia del acuerdo al mencionar que el objetivo principal es atraer inversiones significativas a Ucrania. Un aspecto interesante de este acuerdo es que no establece ninguna obligación de deuda para Ucrania con respecto a Estados Unidos, lo cual es un punto crucial que permitirá a Ucrania manejar sus finanzas de manera más flexible, sin comprometer su camino hacia la integración europea.
¿Cómo funcionará el fondo conjunto?
Según Svydenko, Estados Unidos realizará contribuciones al fondo, que no solo incluirán recursos económicos directos, sino que también podrían abarcar sistemas de defensa aérea para apoyar a Ucrania en sus esfuerzos de autodefensa. Este apoyo subraya la intención de Estados Unidos de no solo impulsar la economía ucraniana, sino también ofrecer soporte en términos de seguridad nacional.
Se espera que Ucrania contribuya con el 50 por ciento de sus ingresos presupuestarios que se generen a partir de nuevas licencias para la explotación de materias primas esenciales, aunque también tendrá la opción de realizar contribuciones adicionales. Esto establece un marco donde ambas partes están comprometidas en invertir en el desarrollo sostenible del país.
Por último, el fondo asignará sus recursos económicos a proyectos clave relacionados con la cción de minerales, petróleo y gas, así como en infraestructura y producción. Es crucial que tanto Ucrania como Estados Unidos se involucren en la selección cuidadosa de los proyectos de inversión que se financien con este capital, asegurando que las inversiones beneficien efectivamente a Ucrania en su proceso de reconstrucción y crecimiento.
31