
Un juez, un funcionario de la oficina del fiscal general, dos abogados y dos individuos Fueron capturados en el Atlántico en el marco de una investigación por un fraude millonario con títulos judiciales, lo que habría causado un Detrimento patrimonial más de 2,000 millones de pesos.
Según un informe publicado por Diario Barranquillero El Heraldo, la operación fue dirigida por el Grupo de Investigaciones Especiales del área anti -corrupción de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (Dijín).
Después de varios meses de consultas, la captura de seis personas indicó formar una red penal que operaba durante más de cinco años, manipulando procesos judiciales para ordenar pagos fraudulentos.
Cómo funcionó la red
Las autoridades documentan que, entre 2016 y 2022, el juez y el entonces secretario del Primer tribunal promiscuo de Barranquilla Habrían autorizado más de 2.500 pagos judiciales a terceros sin legitimación, incluidas familiares y familiares. Los montos superaron los 2,000 millones de pesos, recursos que salieron de manera irregular de los procesos que permanecieron inactivos o cuyos títulos no habían sido reclamados.
El esquema ilícito habría operado entre 2016 y 2022. Foto:Istock
“El esquema consistía en ordenar el pago de títulos en procesos que permanecían inactivos o que no habían sido cobrados, beneficiando a dos abogados y dos personas fuera del proceso judicial y sin el poder legítimo de actuar. Uno de los beneficiarios era un familiar directo del ex Secretario Judicial y aparece como uno de los principales receptores de pagos fraudulentos.«, Detalló una fuente judicial citada por el periódico local.
Evidencia imputada y crímenes
La investigación permitió recopilar evidencia técnica y documental, incluidas huellas digitales y firmas en las órdenes de pago que coincidieron con las de los funcionarios involucrados. Con este material, la fiscalía imputará lo capturado lo queS crímenes de peculación para apropiación y concierto para cometer crímenes, como co -autores.
Los investigadores de Dijín explicaron que este TiPO de fraude afecta directamente la credibilidad de la justicia, Dado que manipulan recursos que deberían estar destinados a procesos legítimos y que el fin se desvió a favor de las personas sin ningún derecho.
El caso ha generado preocupación en el Atlántico, ya que es un esquema prolongado en el tiempo que involucró a los operadores judiciales en el ejercicio de sus funciones. El detrimento, calculado en más de 2,000 millones de pesos, Representa uno de los fraudes judiciales más grandes detectados en la región en los últimos años.
Las autoridades No descartan nuevas capturasDado que la investigación continúa estableciendo si hubo más beneficiarios u funcionarios que facilitaron los pagos.